El Gobernador del Estado de Pensilvania, Tom Corbett, firmó el lunes una orden de ejecución para un hombre de 28 años, convicto por matar a tiros a su novia, de 21, y a la criatura de ambos, de 19 meses.
Michael Parrish recibirá una inyección letal el 14 de octubre, según la Oficina del Gobernador.
En marzo de 2012, el hombre del Condado de Monroe fue hallado culpable de matar a Victoria Adams, y al hijo de ambos, Sidney Michael Parrish, el 6 de julio de 2009.
Se informó que el día de su muerte, Adams dijo a familiares y amigos que Parrish era controlador y abusivo, y pensaba terminar la relación cuando regresara al apartamento que compartían.
Temerosa de cómo su novio reaccionaría, Adams fue acompañada por varios familiares y una amistad al apartamento donde Parrish se encontraba con el hijo de ambos.
La mujer entró sola, y minutos más tarde, Parrish salió del edificio y mostró una pistola al grupo, que esperaba afuera por el regreso de Adams.
Luego, regresó al apartamento y disparó en múltiples ocasiones, impactando a Adams ocho veces, mientras que el niño recibió seis disparos.
Al escuchar el tiroteo, los familiares de Adams entraron al apartamento, pero Parrish comenzó a disparar en su dirección.
El grupo huyó en su carro y Parrish escapó, informó la Oficina del Gobernador.
Se lanzó una búsqueda multiestatal, y el hombre fue arrestado el 8 de julio de 2009 en New Hampshire.
Ésta es la orden de ejecución número 36 firmada por Corbett desde que asumió la gobernación del estado en enero de 2011.
La última persona ejecutada en Pensilvania fue Gary Heidnik, de 56 años, quien murió el 6 de julio de 1999.
