Una madre mexicana de siete niños rompió el silencio tras verse desamparada luego de que deportaran a su esposo el pasado siete de marzo.
La mujer, quien solo quiso ser identificada como Flor por temor a las autoridades migratorias (ICE), dijo que su esposo Isaías Rodríguez fue detenido por dos patrullas estatales rumbo a su lugar de empleo en Pleasantville, Nueva Jersey.
“Como dos horas más tarde me llamó que estaba detenido”, relató Flor al tiempo que destacó que “se me vino el mundo encima”.
La mujer y su esposo, quien fue enviado a Tamaulipas, México mantienen comunicación vía telefónica con la esperanza de en algún momento volverse a reunir.
“El gobierno está reforzando sus medidas migratorias y la gente trata de salir lo mínimo posible. Algunos lo hacen por cosas relacionadas a sus hijos, pero tratan de evitar eventos sociales, ir de compras y hasta llevar los niños a la escuela”, sostuvo Nefaki Moreno, activista comunitario.
Este sentir de “terror” ante la deportación reina en otros sectores de Pensilvania y Delaware. Tan pronto como el jueves una madre fue detenida en Miami, Florida cuando fue a llevar a su hija al colegio, mientras que otros arrestos surgieron en Texas, pero en este caso el inmigrante tenía antecedentes penales.
