Si bien decenas de negocios en Atlantic City, Nueva Jersey cerraron como parte de la iniciativa “Día sin inmigrantes” otros abrieron sus puertas por temor a perder sus ingresos o en ocasiones el empleo.
Así lo pudo constatar Christian Cazares de Telemundo 62 quien hizo un recorrido por la zona.
“Vamos a tener todo en regla como dice el anuncio, porque mi negocio se mueve mayormente con la gente hispana. Ellos son los que nos traen el dinero”, sostuvo Ana Salazar quien cerró las puertas de su restaurante y dejó libre a sus cuatro empleados siguiendo la iniciativa colectiva.
Sin embargo los comerciantes que se mantuvieron abiertos tuvieron una opinión distinta. “Tenemos conocimiento de que a muchos no les dieron el día libre y pueden tener la mala fortuna de que sean despedidos”, sostuvo Nefaki Moreno.
Y es que lo cierto es que el impacto económico fue lo que más imperó a la hora de cerrar o no un establecimiento. “Vine a trabajar porque hay cuentas que pagar. No tengo nada en contra de los inmigrantes”, dijo Reynaldo Molina.
Otro que consideró que era importante continuar laborando fue Héctor Castillo quien aseguró que “la gente tiene que comer”.
De todos modos hubo quien se tomó el riesgo de cerrar el negocio o simplemente no acudir al empleo. Este fue el caso de María quien aseveró “no tengo miedo de nada. Los hispanos merecemos que se logre algo, no queremos la separación”.
