Justo a tiempo para la temporada festiva, un banco de comida de Delaware recibió un regalo inesperado por parte de una mujer que murió recientemente.
Patricia Beebe, presidenta del Banco de Comida de Delaware, recibió una carta, en la que se enteró de que una enfermera de Newark que murió de cáncer recientemente en sus 50 años, le dejó a la institución su casa, así como $100 mil.
La mujer no estaba casada ni tenía hijos, pero empleados creen que en algún momento fue cliente del banco de comida.
La casa será vendida por $199 mil, y el dinero de la venta irá al fondo general del banco de comida.
La mujer, que no será identificada a petición de su sobrina, dijo que su tía no hubiera querido que su nombre se diera a conocer. Un vecino comentó que la mujer siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás.
Aunque los empleados del banco de comida están agradecidos por el increíble regalo, quisieran haber conocido a la mujer antes de su muerte.
“Esta mujer nos ha dado el mayor regalo que jamás hemos recibido, y no podemos agradecerle porque murió”, dijo Beebe.
