“No se lo deseo a nadie, es una pesadilla horrible”, dijo de primera instancia la madre de la niña, de cuatro años, quien fue víctima de un presunto agresor sexual en Avondale, Pensilvania.
La matriarca, quien no quiso revelar su identidad para proteger a la menor, explicó que su esposo (el padre) se levantó a ir al baño de madrugada cuando se percató que la chiquilla no estaba en el apartamento familiar. Acto seguido fue a buscarla.
“Salimos a buscarla y él al tenía en brazos y se la quitamos”, sostuvo el progenitor quien fue quien dio con la impactante escena en una casucha cerca de su vivienda Chester County.
Segú el fiscal Tom Hogan la niña fue secuestrada de su hogar, a eso de las 3:00 a.m., y más tarde agredida sexualmente por Humberto Guzmán-García, de 35 años. La pesquisa arrojó que el presunto atacante le tocó la ventana a la menor, para lograr acceso al apartamento y llevársela. Caminó unos 50 pies hacia una casucha de herramientas que queda aledaña donde se supone que la abusó.
“Lo importante es que ella está tranquila”, dijo la madre antes de sostener que “las palabras que quisiera decirle a ese hombre no las puedo decir en público porque no son agradables”.
La familia dijo que el complejo de vivienda donde residen les cambió la cerradura o chapa y han visto mayor presencia policial en la zona. Sin embargo no tiene idea del siguiente paso a dar.
Una vecina aseguró que vio al presunto implicado anteriormente y hasta le tocó la puerta. “No más recuerdo que tocó muy recio en mi apartamento y cuando salí lo vi”.
EEUU
Se informó que Guzmán-García fue apresado escondiéndose en un vehículo abandonado relativamente cerca del lugar del ataque, en Avondale, según el Fiscal de Distrito de Chester County.
La última dirección residencial del acusado ubica en Lake Road en Avondale, pero supuestamente no conocía a la víctima ni a los padres de ésta, según la Fiscalía.
