Tremenda golpiza le dio un empleado de McDonalds a un cliente luego de que éste supuestamente le lanzara con una silla para niños.
El reporte policial establece que la disputa se generó en el establecimiento de comida rápida que ubica en la cuadra 200 de West Main Street en Norristown, Pensilvania. Todo esto el pasado seis de septiembre.
Hasta el momento el trabajador, identificado como Demetrius Burrell-Hunt, de 20 años, se mantiene evadido de la justicia por cargos de asalto, peligro imprudente, amenazas terroristas y delitos relacionados.
La presunta víctima fue identificada como John Fazzio.
El acusado le dijo en su relato a las autoridades que mientras "se defendió" del ataque con la silla para niños sufrió un "blackout o desmayó" por lo que no se percató de cuánto le pegó al individuo.
Fazzio fue atendido por paramédicos, tras contusiones en la cabeza y el cuerpo, y transportado al centro médico Paoli.
Decenas de testigos dijeron que el empleado fue quien inició la disputa cuando escoltaba a al víctima fuera del restaurante. Imágenes de vigilancia y de celulares muestran claramente los golpes. Fueron patadas y puños.
EEUU
Una delcaración jurada establece que el cliente estaba a punto de llegar a la salida cuando el sospechoso, quien esperaba en la puerta con una escoba, usó el palo de escoba para golpear a la víctima en la parte posterior de la cabeza, según el documento policial.
La víctima se dio la vuelta y arrojó una silla alta para niños al empleado, quien luego la arrojó hacia atrás, abordó a la víctima y comenzó a golpearlo ya que "estaba indefenso y en el suelo", dijo la declaración jurada.
El empleado le dijo a un oficial que se había "desmayado" durante el ataque, dijo la Policía. Un testigo dijo a los oficiales que él intervino y detuvo el asalto porque vio a la víctima perder el conocimiento.
