La ex fiscal general de Pensilvania, Kathleen Kane, está tras las rejas después de presentarse en una cárcel suburbana de Filadelfia para comenzar a cumplir con una sentencia por filtrar material del gran jurado y mentir al respecto.
Kane se presentó en el Centro Correccional de Montgomery County justo antes de las 8:00 a.m. del jueves, una hora antes de la fecha límite para reportarse, para comenzar un período de 10 a 23 meses por perjurio, obstrucción y otros cargos.
Kane pareció sonreír antes de dejar el lado del pasajero de una camioneta y entrar rápidamente a la prisión.
La mujer de 52 años, residente de Scranton, había sido considerada como una estrella política en ascenso en el estado después de convertirse en la primera demócrata y la primera mujer en ser elegida como la principal fiscal del estado.
Un juez del condado nombró a un fiscal especial para investigar a Kane después de que ex fiscales lo alertaran de que se había filtrado material secreto del gran jurado a un periódico.
Kane renunció después de su condena en 2016, pero se le permitió permanecer libre bajo fianza en espera de las apelaciones.
El 26 de noviembre, la Corte Suprema del estado se negó a ocuparse de su caso, lo que llevó a un juez del condado a revocar su fianza.
EEUU
Kane había argumentado ante el Tribunal Superior que se le debió haber permitido usar en su defensa un supuesto correo electrónico de contenido pornográfico y pruebas relacionadas con el caso de abuso de menores de Jerry Sandusky, que su oficina anterior procesó antes de que ella fuera elegida.
Kane había criticado la investigación de Sandusky mientras se postulaba para el cargo en 2012, generando resentimiento entre los fiscales en el caso que le contaron al juez sobre las filtraciones del gran jurado.
"Esto es la guerra", escribió Kane en un correo electrónico de 2014 que se transmitió en el juicio.
Los otros argumentos de Kane se afirma que se obtuvieron pruebas ilegales en su contra y que ella fue víctima de un proceso judicial selectivo y vengativo.
