Un investigador de la Policía estatal detalló el hallazgo del cadáver de una estudiante de Temple University dentro de un contenedor azul en un cobertizo de metal en la zona rural de Wayne County, Pensilvania, durante el juicio al acusado Josh Hupperterz.
Jenna Burleigh fue asesinada en agosto de 2017. Su cuerpo fue encontrado en un cobertizo en una propiedad boscosa propiedad de los abuelos de Hupperterz.
Después de que el testigo ofreciera un informe paso a paso de la búsqueda en la propiedad, se mostraron fotografías tomadas como evidencia, del cuerpo de Burleigh dentro de la bañera, en la que se apreciaba el grave estado en el que la Policía lo halló.
Hupperterz ya se declaró culpable de abuso de un cadáver y de manipular la evidencia para trasladar el cuerpo de Burleigh a la casa de sus abuelos. Pero se declaró inocente de asesinato y uso de un instrumento de crimen.
Los fiscales afirmaron que Hupperterz atacó y mató a Burleigh después de tener sexo con ella. Pero el abogado defensor de Hupperterz, David Nenner, señaló a su compañero de cuarto como el verdadero asesino.
Siguiendo el testimonio de expertos en ADN y forenses el lunes, Nenner le pidió al juez Glenn Bronson que le permitieran llamar a un experto en toxicología para evaluar el testimonio dado por ese compañero de cuarto, Jack Miley, anteriormente en el juicio.
Miley había testificado que estaba demasiado intoxicado y drogado con una mezcla de cervezas, whisky y Xanax para despertarse de cualquier pelea entre su compañero de cuarto y Burleigh.
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Nenner argumentó que Miley acostumbra perder el conocimiento cuando está intoxicado y que en medio de esa mezcla tóxica de alcohol y drogas podría haber hecho algo que no recuerda.
Bronson dijo que Nenner tendría que proporcionar alguna evidencia de que Miley ha estado en tal condición antes, para entonces poder llamar a un toxicólogo que pueda evaluar su condición la noche en que Burleigh fue asesinada.
Un experto forense de ADN del departamento de la Policía de Filadelfia reanudará su testimonio el martes por la mañana. Durante gran parte de la tarde del lunes, el científico, Benjamin Levine, declaró que el ADN en la escena del crimen dentro del apartamento de Hupperterz vinculó al acusado y a Burleigh con sangre y partículas de piel en evidencia. Ninguna de las pruebas de ADN vinculó a Miley con la violencia que precedió al asesinato de Burleigh, testificó Levine.
Los fiscales aseguran que Hupperterz, después de tener relaciones sexuales orales, vaginales y anales con Burleigh, la "tiró al suelo y la estranguló, desnuda, en el piso de la cocina".
Hupperterz golpeó a la estudiante de cine 38 veces, rompió un tazón de cereal sobre su cabeza, la apuñaló repetidamente después de arrancarle un cuchillo y luego la estranguló tan severamente que le rompió la laringe, según el asistente del fiscal de distrito Jason Grenell.
Miley declaró que se despertó la tarde siguiente para encontrar a Hupperterz "sudando profusamente y muy nervioso”. Este no está acusado de un delito.
"¿No puedes escuchar a la gente gritar como si fuera una película de terror?”, preguntó David Nenner, el abogado de Hupperterz, a Miley la semana pasada.
"No", respondió Miley, agregando que una combinación de alcohol, cannabis, Xanax y el ruido de un ventilador de piso le impedían escuchar los gritos de Burleigh.
A lo largo de gran parte del testimonio del viernes, el abogado de Hupperterz impugnó el recuerdo de Miley, revisando varias páginas de registros telefónicos que mostraban que Miley y Hupperterz se llamaron después de salir de Pub Webb y varias veces durante la tarde siguiente. Miley dijo que al menos algunas de las llamadas eran para obtener la contraseña de WiFi para sus hermanas.
Una de sus hermanas declaró el viernes que ella se llegó a sentaren un futón de la sala que tenía sangre salpicada. La sangre también se encontró en la cocina y el baño, y sobre una escoba, una gasa y trozos de cerámica rota, dijeron los investigadores.
Un agente de la Policía del Estado de Pensilvania también se presentó el viernes y dijo al jurado que Hupperterz nunca mencionó el nombre de Burleigh durante las tres horas de interrogatorio. Le dijo a los funcionarios que los rasguños en su cuello eran el resultado de relaciones sexuales ásperas con una mujer llamada Vicky.
Durante el interrogatorio, Hupperterz parecía "tranquilo y conversador", según la Policía estatal.
A principios de la semana pasada, el primo de Hupperterz declaró que, sin saberlo, ayudó a transportar el cuerpo de Burleigh fuera de la ciudad en una bolsa azul.
El primo, Erick Carlson, no ha sido acusado en relación con el asesinato. El hombre de 30 años dijo que encontró a Hupperterz limpiando sangre en su apartamento.
Hupperterz rechazó una oferta de culpabilidad en diciembre de la oficina del Fiscal del Distrito de Filadelfia, que había ofrecido de 30 a 60 años de prisión a cambio de una declaración de culpabilidad. Podría enfrentar cadena perpetua si es declarado culpable en el juicio.
