Los conductores de Pensilvania obtendrán algo de alivio cuando transiten por las carreteras que tienen cráteres, tras el anuncio de una inversión de $180 millones para trabajos de reparación y mantenimiento en las vías después de los estragos dejados por un invierno particularmente difícil.
El gobernador demócrata Tom Wolf anunció el jueves la asignación de $22 millones para la reparación de baches y pavimentos, presupuesto que alcanza para comprar casi 30,000 toneladas de material de pavimentación.
El Departamento de Transporte de Pensilvania quemó casi 23,000 toneladas de asfalto para reparar baches hasta fines de abril. Usó alrededor de 15,000 toneladas durante el mismo período del año pasado y en 2016, se dijo.
El estado también planifica gastar $7 millones en trabajo de mantenimiento interestatal, $30 millones para mejoras interestatales, $60 millones para repavimentación y $62 millones en conservación interestatal.
PennDOT dijo que las personas pueden informar sobre los cráteres en las carreteras y otros problemas de mantenimiento llamando al 1-800-FIXROAD.
