Oraciones y cánticos fueron las armas de decenas de activistas pro inmigrantes quienes se manifestaron en las afueras de las oficinas migratorias de ICE en Filadelfia para pedir “un milagro de Acción de Gracias”.
Los participantes urgieron a los funcionarios a que no separen familias durante la temporada festiva que se avecina.
“Estamos rezando por justicia en el futuro”, leían las pancartas de los activistas del Movimiento Nuevo Santuario quienes solicitaron la salida de santuario de dos familias acogidas en una iglesia de Filadelfia hace varios meses.
“Ya van varias semanas que se hizo la aplicación de cancelación de deportación y todavía no tenemos respuesta. Queremos que se acuerden y estamos luchando en buena fe”, destacó Blanca Pacheco, líder del grupo.
Las familias, una jamaiquina y otra hondureña, se unieron a la causa por medio de una video llamada.
“No es fácil estar luchando desde adentro. Cuánto no quisiéramos estar afuera. No me arrepiento porque al lucha que estoy haciendo es para mis hijos”, destacó Surpaya Reyes, la madre hondureña acogida a santuario.
Los activistas prepararon una canasta con víveres para los oficiales de ICE y en ella colocaron una carta. Solo el escrito fue aceptado. “En estado de lucha somos más fuertes, pero imagínese estar encerrado, es otro tipo de prisión”, sostuvo Carmen Guerrero, miembro de Nuevo Santuario.
