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Crece la controversia por centro de inyección segura

Varios grupos se oponen a la creación del centro en Filadelfia.

Una corte federla le dio el aval a los centros de inyección segura en Filadelfia, pese a la oposición de ciertos sectores.

Un juez federal le dio el visto bueno a la apertura de un centro de inyección segura en Kensington, Filadelfia pese a la fuerte oposición de varios sectores de la comunidad.

El miércoles, el magistrado Gerald A. McHugh dictaminó que el establecimiento no viola las leyes federales y explicó sus argumentos en un documento de 56 páginas, en donde analiza la propuesta de la organización sin fines de lucro “Safehouse”.

Rosa Goldfein, vicepresidenta de “Safehouse”, dijo a TELEMUNDO 62 que le satisfizo la determinación, porque el espacio intenta salvar vidas, algo que no convence a los residentes del sector.

“La muerte de esta comunidad, eso es lo que va a ser”, dijo Gilberto González, quien ha vivido en Kensington por 35 años y es una de las personas que se opone a la propuesta. “Traer un safe site aquí, va a terminar con esta comunidad. Los que venden drogas ellos quieren esto aquí. Lo que va a pasar aquí en este barrio es que va a haber guerrilla con los que venden drogas”. 

“Safehouse” consideró más de dos docenas de ubicaciones en Filadelfia, pero encontró una propiedad en Hilton Street. Según la propuesta, en el lugar se podrá usar cocaína, heroína, metanfetaminas y otras drogas ilegales bajo supervisión médica.

“Inviertan el dinero en las escuelas, en limpiar las calles, trayendo trabajos para que los jóvenes tengan lugares donde hacer su dinero”, opinó González. 

El fiscal estadounidense William McSwain también mostró resistencia con la medida y destacó que le parece “claramente ilegal”.

En recientes declaraciones recalcó que el proyecto es una combinación de prácticas ilegales, después de que presentara una moción hace varios meses, en la que había expuesto su oposición a la medida.

En particular, en el argumento expuso el estatuto 856, también conocido como el estatuto de "crack house", que hace ilegal "abrir, arrendar, alquilar, usar o mantener a sabiendas cualquier lugar ... con el propósito de fabricar, almacenar ilegalmente , distribuir o usar una sustancia controlada".

Sin embargo, en su declaración, el juez McHugh escribió que el estatuto, adoptado en 1986, no se aplica a los sitios de inyección segura.

Por su parte, altos funcionarios de la ciudad, como el alcalde de Filadelfia, se mostró a gusto.

“Aplaudo la decisión del Tribunal.  Está claro que el Congreso no podría haber prohibido los sitios de prevención de sobredosis. Creo que los sitios pueden salvar vidas, reducir la transmisión de enfermedades infecciosas, ayudar a conectar a las personas que sufren de trastorno por uso de sustancias y otros servicios, y reducir la basura asociada con el uso de drogas al aire libre”.

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