Intacta. Así aseguraron mantener su fe, los feligreses católicos de Allentown luego de una demanda por medios noticiosos para que se develen informes sobre posibles agresiones sexuales en varias Arquidiócesis de Pensilvania.
“Cada quien da cuenta por separado al Señor. Él nos dice haz lo que tu ministro mande pero lo que haga el déjamelo a mí”, dijo de primera instancia Damaris Fernández, residente de la zona y asistente a la Parroquia del Sagrado Corazón.
La duda sobre lo que revelara el informe sigue latente y en vías de eso Telemundo 62 solicitó una entrevista con la Arquidiócesis de Allentown, pero esta fue denegada. Cabe señalar, que esta es una de las ocho instituciones incluidas en las acusaciones de agresión sexual infantil.
“Nuestros sacerdotes son santos, confiamos en ellos”, agregó Luz Tavera.
En Pensilvania, las investigaciones por parte de un gran jurado son asunto público, pero en junio individuos mencionados en el reporte solicitaron privacidad argumentando que pudieran ser difamados de manera irreparable.
El clero por su parte tuvo hasta el martes para presentar argumentos sobre la publicación o no del informe.
