Policía de Filadelfia

Acusan a oficial hispano de agredir y robar a terceros

Luis Miranda laboraba para la Policía de Filadelfia.

Un oficial hispano de la Policía de Filadelfia fue acusado de robar y agredir a 15 personas en un negocio al norte de la ciudad.

El oficial Luis Miranda, de 40 años, fue acusado de robo, conspiración, asalto agravado, amenazas terroristas, uso ilegal de una computadora, robo de computadoras, posesión con intención de entregar y otros delitos relacionados.

Miranda, junto con Gregorio Esquilín, de 56 años, y su hijo Juan Luis Esquilín, de 32, supuestamente conspiraron para robar a varias personas que jugaban en un negocio a lo largo de la cuadra 4200 de Rising Sun Avenue.

El 17 de diciembre de 2017, los tres sospechosos robaron, amenazaron o agredieron a 15 personas en el negocio, según los investigadores. Miranda también está acusado de estar involucrado en actividades relacionadas con drogas y de utilizar indebidamente los recursos policiales con fines delictivos.

"El mismo día que nos enteramos de estos hallazgos, Miranda fue removido inmediatamente de las tareas de la calle cuando nuestra División de Asuntos Internos realizó una investigación", dijo la comisionada Danielle Outlaw. "Posteriormente, los hallazgos de esa investigación fueron entregados a la Oficina del Fiscal del Distrito para revisión."

Miranda fue suspendido por 30 días, con la intención de despedirlo al final de los 30 días.

"Es más obvio que nunca que los oficiales de Policía tienen que reparar la confianza de la comunidad para hacer su trabajo de manera efectiva", dijo Outlaw. "Para que eso comience, debemos demostrar que decidimos identificar y eliminar a los malos actores de nuestras filas".

Gregorio y Juan Luis Esquilín están acusados ​​de robo, conspiración, asalto agravado, amenazas terroristas y otros delitos relacionados.

"Es más probable que ocurran delitos por parte de la Policía donde hay un vacío de responsabilidad", dijo el fiscal de distrito Larry Krasner. “Los oficiales de Policía tienen una posición de confianza, y el sistema legal penal siempre ha considerado el abuso de una posición de confianza como un delito extremadamente grave".

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