Funcionarios de protección ambiental de Nueva Jersey dijeron el jueves que esperan tener una ley que proteja a las comunidades de la contaminación para fines de este año.
El gobernador Phil Murphy firmó la ley en septiembre de 2020 en Newark, pero aún no se han completado la reglamentación, los comentarios públicos y otros procedimientos.
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Los funcionarios del Departamento de Protección Ambiental del estado dijeron que esperan aprobar las reglas que explican los detalles de la ley para el 31 de diciembre, lo que marcaría el punto en el que la ley se implementaría por completo.
Mientras tanto, el comisionado del DEP, Shawn LaTourette, emitió una orden administrativa que exige que los proyectos actuales y futuros cumplan con sus objetivos.
Dijo que la orden tiene el efecto práctico de “colocarnos donde finalmente lo haría la regla”.
Murphy firmó la ley para evitar que las comunidades, a menudo vecindarios minoritarios de bajos ingresos, tengan que soportar la peor parte de demasiadas fuentes de contaminación.
“Este es un gran problema”, dijo LaTourette durante una sesión informativa para periodistas sobre la situación actual de la ley. “Hemos luchado con esas preguntas difíciles. Creemos que hemos aterrizado en el lugar correcto”.
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Debido a que aún no está en pleno efecto, la ley no afecta directamente uno de los casos de justicia ambiental más disputados en el estado, la propuesta de agregar una planta de energía de respaldo a gas en una instalación de tratamiento de aguas residuales en la sección Ironbound de Newark.
Ese vecindario ya sufre de múltiples fuentes de contaminación de las centrales eléctricas cercanas, un aeropuerto internacional, numerosas carreteras y el tráfico pesado de camiones a través de los vecindarios residenciales.
LaTourette dijo que no prejuzgaría la solicitud, que ya está siendo considerada por su agencia.
Pero él y otros funcionarios del DEP dijeron que hay pasos que la planta de energía y otros solicitantes podrían tomar para disminuir la contaminación en el área, incluso en lugares fuera de su propiedad.
En enero, el gobernador ordenó a la Comisión de Alcantarillado de Passaic Valley que detuviera un plan para construir la mayor parte de una planta de energía de respaldo de $180 millones, diseñada para funcionar cuando la instalación principal se desconecte.
La comisión ha propuesto medidas que incluyen la adopción de controles de contaminación "de última generación" que van más allá de los requisitos propios del estado.
La comisión asegura que solo operará la planta de energía de respaldo durante emergencias y solo para mantenimiento básico; en un año en el que no ocurran emergencias, la planta de respaldo operaría un máximo de 12 días al año.
Además, abandonó un plan para usar la planta de energía de respaldo en los días de alta demanda eléctrica, lo que dice eliminará 700 horas de operación. También dice que planea instalar "toda la energía solar técnicamente factible que pueda".
También planea pasar del gas natural a combustibles más limpios tan pronto como sea posible, incluido el uso de energía de batería.
La planta de energía de respaldo está diseñada para evitar que se repita lo que sucedió durante la supertormenta Sandy en 2012, cuando casi mil millones de galones de aguas residuales sin tratar fluyeron hacia las vías fluviales cercanas cuando la planta se desconectó debido a la falta de electricidad.
La comisión apuntó que sin la planta de respaldo, las calles de la sección de Ironbound podrían inundarse de aguas residuales sin tratar durante una tormenta grave que dejaría sin electricidad la instalación de tratamiento de aguas residuales.
LaTourette predijo numerosos desafíos legales a la ley una vez que entre en vigencia.
"Los abogados construirán carreras enteras dividiéndose los pelos", dijo.
