Las autoridades sanitarias de Pensilvania dieron a conocer la cantidad de contagios y muertes por brotes de coronavirus en las instalaciones de cuidado a largo plazo o hogares para ancianos a nivel estatal.
Más de 2,800 fatalidades fueron reportadas en estos espacios congregados desde que inició la crisis de salud. Esto representa el 60% de todos los decesos del estado que hasta el martes 19 de mayo alcanzaron los 4,463.
Unos 200 asilos fueron puestos bajo investigación por el Departamento de Salud y la Guardia Nacional y once de éstos cuentan con la mayor cantidad de muertes.
Según la secretaria de salud Rachel Levine al menos 20 adultos mayores fallecieron en 47 instalaciones de cuidado a largo plazo en Pensilvania. Este dato provocó que el estado someta tanto a residentes como a personal de cuidado en los centros a someterse a pruebas del COVID-19 regularmente.
El asilo de ancianos más afectado por los brotes fatales del coronavirus fue Brighton Rehab and Wellness Center con un total de 78 residentes fallecidos. En segundo lugar figuró Parkhouse Nursing and Rehabilition Center en Royersford, Montgomery County con 48 muertes.
Otras seis instalaciones para adultos mayores, incluyendo dos en Delaware County y una en los condados Bucks, Chester y Filadelfia, reportaron alrededor de 32 muertes.
Levine dijo a los medios de comunicación que se enviaron encuestadores a cada centro de cuido para registrar el alza en infecciones y continuarán monitoreando los 400 hogares en el estado.
