Un repartidor le disparó a un empleado adolescente de Chick-fil-A durante una discusión por un batido, dijo la Policía de Filadelfia.
Poco antes de las 8:30 p.m., la Policía respondió a un tiroteo reportado afuera del restaurante Chick-fil-A a lo largo de la cuadra 800 de Adams Avenue.
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Cuando llegó la Policía, encontraron a un empleado, de solo 17 años, con una herida de bala en la pierna izquierda. El adolescente fue llevado al Einstein Hospital, donde se encuentra en condición estable.
Al investigar más a fondo el incidente, los investigadores indicaron que la discusión habría iniciado luego de que el sospechoso, un repartidor de DoorDash de 26 años, alegó que a su orden le faltaba una "MilkShake".
Los testigos le dijeron a la Policía que los dos luego comenzaron a discutir sobre el pedido luego de que el conductor se rehusó a mostrar el recibo del pedido.
La discusión luego se intensificó y el repartidor salió de su vehículo, sacó un arma y le disparó al adolescente en la pierna antes de huir de la escena, se dijo.
Horas después, el sospechoso, quien conducía un Mercedes Benz blanco y tenía un tatuaje en el cuello, fue arrestado tras una persecución en los suburbios.
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“Estamos bastante seguros de que podremos identificar no solo el vehículo, sino también al tirador involucrado en este incidente”, dijo el inspector jefe de la Policía de Filadelfia, Scott Small.
En otro comunicado, la empresa de comida DoorDash indicó que están "horrorizados y consternados" ante el incidente y resaltaron que han expulsado de por vida al sospechoso de la plataforma.
