Los avisos verbales y las amonestaciones para seguir el protocolo de distanciamiento social y sobre todo de limpieza en Filadelfia se acabaron.
A partir del viernes primero de mayo se emitirán multas, de $500 a $2000, a negocios e individuos que no cumplan con los parámetros establecidos de distanciamiento, máscaras protectoras y otras regulaciones sanitarias para mitigar la propagación del coronavirus.
Todo esto en un afán por velar que la reapertura económica de la ciudad sea exitosa.
“Lamentablemente la mejor forma de ganar la atención de la gente es con dinero y por eso aumentamos las multas”, destacó el alcalde Jim Kenney en su conferencia diaria de actualizaciones ante la crisis de salud.
El funcionario explicó que se han emitido varias citaciones y avisos verbales, de parte de la Policía y el Departamento de Salud, pero en la medida en que comience el proceso de reapertura economía “tenemos que ser estrictos y claros en que hay que seguir las normas”.
El director del cabildo, Brian Abernathy agregó que el Departamento de Salud emitió 583 avisos a establecimientos desde que inició el cierre de negocios por el coronavirus y la Policía unas 20 para dispersar grupos de personas congregadas en lugares públicos.
“Este no es tiempo de descartar los protocolos de distanciamiento social y quedarse en casa. Hemos logrado mucho y le agradecemos a todos los que han cumplido. Sin embargo, hemos hecho todo lo posible con las advertencias verbales, pero no fueron suficientes. El mensaje es claro, necesitamos la cooperación del público y los comerciantes. Si no cumplen las órdenes los multaremos y los llevaremos a los tribunales”, destacó Kenney.
Local
Unos 665 nuevos casos positivos se registraron en Filadelfia el jueves para un total de 14,468 contagios desde que inició la crisis de salud. También se reportaron 66 fatalidades para una cifra de 607.
El comisionado Tom Farley dijo que el número es mayor que en otras instancias porque se contabilizaron casos de contagios y muertes que no tenían destinatario, entiéndase, lugar de procedencia y fueron catalogados como tal.
El galeno recalcó que estamos pasando el pico de la enfermedad, pero que sigue muy presente en el ambiente atacando mayormente espacios donde se congregan muchas personas como los asilos de ancianos y las prisiones.
Entre la población carcelaria se registraron dos nuevos contagios, para un total de 65 reclusos infectados con cinco que se recuperaron y abandonaron el aislamiento.
