Un joven de 14 años falleció luego de que una pandilla de hombres lo persiguió y baleó decenas de veces a plena luz del día el lunes en Filadelfia.
El violento suceso ocurrió a eso de las 3:30 p.m. del lunes y testigos dijeron a la Policía que el menor, identificado como Samir Jefferson, estaba parado en la esquina de las avenidas Rising Sun y Wyoming esperando un autobús, cuando varios hombres salieron de un vehículo, se acercaron a él y lo tirotearon.
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Según la policía, el joven intentó huir de los pistoleros pero estos lo alcanzaron y le dispararon al menos 18 veces en todo el cuerpo y lo dejaron tirado en la acera.
El menor luego fue llevado al Temple University Hospital, donde fue declarado muerto a las 4:03 p.m.
Los hombres armados huyeron en un vehículo que fue detenido por la Policía en la intersección de 5th Street y Somerville Avenue.
Dos hombres considerados personas de interés fueron puestos bajo custodia policial, sin embargo aún se desconoce qué provocó el tiroteo.
Un tercer sospechoso sigue a la fuga pero ha sido identificado.
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La Policía también dijo que encontraron numerosas cámaras de vigilancia en el área.
"Hoy temprano, perdimos otra vida joven a causa de la violencia con armas de fuego sin sentido, la cuarta desde ayer", dijo la comisionada de la Policía de Filadelfia, Danielle Outlaw. "Mi corazón está de duelo por las víctimas, sus familias y esta ciudad. Si bien no podemos recuperar a los perdidos, el Departamento de Policía de Filadelfia se asegurará de que estos casos se investiguen a fondo para que estas víctimas y sus familias reciban un cierre y justicia".
El asesinato ocurrió un día después de que un menor de 16 años recibiera ocho disparos en el norte de Filadelfia. Un estudiante de la Universidad de Temple de 21 años también fue asesinado a tiros durante un robo fuera del campus el domingo por la tarde.
En lo que va del año, Filadelfia ha visto al menos 500 homicidios, una cifra nunca antes vista en la historia de la ciudad.
Según cifras de la policía, de esas 500 víctimas, 40 de ellas han sido menores de edad, una cifra que también representa un récord histórico.
