Cinco custodios del Centro Estatal de Readaptación Social de Valle de Santiago, Guanajuato, conocido como Cereso 1000, fueron emboscados y asesinados murieron durante un ataque de civiles armados contra la camioneta oficial en la que viajaban.
Medios locales como El Sol de Salamanca y El Salmantino reportaron que tres de los custodios murieron durante la agresión y, los otros dos, en el hospital en el que eran atendidos.
El secretario de Seguridad Pública estatal, Alvar Cabeza de Vaca, confirmó la muerte de los agentes.
"Comprometemos nuestros mayores esfuerzos para que se castigue a los responsables y este crimen no quede impune”, expresó vía Twitter.
El funcionario precisó que el ataque ocurrió en la carretera estatal Salamanca-Labor de Valtierra, cuando hombres armados a bordo de tres camionetas interceptaron a los custodios y dispararon contra ellos.
