Detenidos tras tiroteo en partido de fútbol entre secundarias en Pleasantville

Dos menores de edad y un adulto resultaron heridos por la noche del viernes.

Un hombre, de 31 años, enfrenta cargos por dispararle a otro adulto y dos menores en medio de un partido de fútbol americano entre las secundarias Pleasantville y Camden el viernes por la noche, cerca de Jersey Shore.

El tiroteo en las gradas del estadio de Pleasantville envió a jugadores y espectadores a correr en busca de un refugio. 

Alvin Wyatt, de Atlantic City, enfrenta tres cargos de intento de asesinato y otros cargos relacionados con armas después de que las balas impactaran a un niño de 10 años, a un adolescente de 15 años y a un hombre de 27 años, dijo Damon Tyner, fiscal del condado Atlantic. 

Tyner anunció el sábado los arrestos de Wyatt y otros cuatro hombres: Michael Mack, 27 años; Tyrell Dorn, de 28; Shahid Dixon, de 27; y Vance Golden. Estos cuatro individuos fueron acusados ​​de posesión ilegal de un arma y Dixon enfrenta además cargos de eludir la captura.

No está claro si alguno de los hombres tiene abogados que puedan comentar por ellos.

El niño de 10 años, que quedó en medio de los disparos, permanece en estado crítico el sábado, agregó el fiscal.  

El joven de 15 años fue atendido por una herida rasante y dado de alta, mientras que el hombre fue llevado al Centro Médico Regional AtlanticCare en Atlantic City, donde está en condición estable el sábado por la mañana.

Tyner dijo que uno de los niños fue trasladado en avión al Hospital de Niños de Filadelfia para recibir tratamiento.

El juego en Pleasantville comenzó a las 7 p.m. El equipo de Pleasantville ganó su título de primera división en 43 años esta temporada, y las gradas se llenaron para ver a los "Greyhounds" contra los Camden "Panthers".

Un periodista de The Press of Atlantic City, que estaba en el juego, dijo que el tiroteo ocurrió en el tercer cuarto.

Los videos obtenidos por The Associated Press y NBC10 muestran a personas tirándose al suelo, huyendo de las gradas y saltando sobre vallas de alambre mientras suenan los disparos.

Al menos seis disparos se pueden escuchar en un video de Jersey Sports Zone, que también muestra a los jugadores deteniéndose a mitad del partido, mirando a las gradas y luego corriendo.

"Fue un caos, literalmente, la gente venía corriendo en oleadas", dijo Jonathan Diego, quien jugó para el equipo de Pleasantville en 1984. Diego ayudó a entrenar a un equipo juvenil involucrado en un juego contra un equipo de Atlantic City en el que tres espectadores fueron baleados y heridos en 2005. Los tres sobrevivieron.

"Desafortunadamente, por aquí no es tan raro como parece", dijo Diego.

Diego describió una escena de pánico mientras algunos niños fueron separados de sus padres, y otros padres abrazaron a sus bebés y niños pequeños para evitar que espectadores desesperados los hirieran.

El hombre dijo que su amigo, un paramédico jubilado, brindó primeros auxilios a un niño que había sufrido una herida de bala en el cuello. "Aplicó presión sobre las heridas del niño en su cuello, tratando de disminuir el sangrado hasta que la ambulancia pudiera aparecer", dijo. 

Después del tiroteo, los hombres acusados ​​de cargos de armas huyeron del Departamento de Policía de Absecon hacia Atlantic City. Uno de los pasajeros arrojó una pistola del automóvil cuando ingresaron a Atlantic City, dijeron los investigadores.

Una declaración del Distrito Escolar de la Ciudad de Camden dijo que ningún estudiante de la Escuela Secundaria Camden "resultó herido o de otra manera dañado".

"A diferencia de algunos de los tiroteos ocurridos en las instalaciones de la escuela en todo el país, este incidente no tuvo nada que ver con los estudiantes de Pleasantville High School o Camden High School", dijo Tyner. "El lugar simplemente presentó una oportunidad para que los delincuentes persigan su propia forma de pequeña venganza unos contra otros. Como resultado, un niño inocente fue atrapado y herido en su fuego cruzado".

El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, elogió los esfuerzos de los médicos y de la policía al mencionar el pánico causado por el tiroteo.

"El fútbol americano de playoffs de la escuela secundaria debería ser motivo de celebración comunitaria, no el telón de fondo del pánico y el terror", dijo el gobernador. "Estoy agradecido por las acciones rápidas que salvan vidas de los socorristas para atender a los heridos, y nuestras oraciones están con las víctimas para una recuperación rápida y completa".

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