Un exoficial de policía de Filadelfia se declaró culpable el viernes de asesinar a tiros a un niño de 12 años que según los fiscales, estaba en el suelo y desarmado cuando el oficial disparó el tiro fatal en el 2022.
Edsaul Mendoza también se declaró culpable de posesión de un instrumento delictivo como parte de un acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía del Distrito de Filadelfia.
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En conferencia de prensa el viernes, funcionarios indicaron que " en la sentencia podrían darle entre siete y medio, y 20 años en la cárcel", dijo Larry Krasner, Fiscal de Distrito de Filadelfia.
Mendoza había sido acusado de asesinato en primer y tercer grado y homicidio voluntario por disparar contra Thomas “T.J.” Siderio en marzo de 2022, y la oficina del fiscal de distrito de Filadelfia dijo en ese momento que el video contradecía la versión de los hechos del oficial.
La policía ha dicho que el niño había disparado primero contra un auto de policía sin distintivos, hiriendo a uno de los cuatro agentes vestidos de civil que se encontraban dentro.
Mendoza, un veterano de cinco años en la fuerza, fue despedido una semana después del tiroteo por la entonces comisionada de policía Danielle Outlaw, quien dijo que su conducta violaba la política del departamento.
Siderio arrojó un arma unos 12 metros (40 pies) antes de recibir el disparo y luego cayó al suelo, tropezando u obedeciendo una orden de agacharse, según las autoridades.
Los cuatro agentes estaban en un automóvil buscando a un adolescente al que querían entrevistar en relación con una investigación sobre armas de fuego, dijo la policía. Vieron a Siderio y a un joven no identificado de 17 años, y manejaron alrededor de la cuadra y junto a ellos para iniciar una parada.
Los fiscales dijeron el lunes que casi al mismo tiempo que los oficiales encendieron las luces rojas y azules, un disparo entró por la ventana del pasajero trasero y rebotó alrededor del auto. Un oficial fue tratado por lesiones en el ojo y la cara causadas por vidrios rotos.
Mendoza y otro oficial en el lado del pasajero salieron y dispararon un tiro cada uno, según la policía. Luego, Mendoza persiguió a Siderio por la cuadra, disparó dos veces y golpeó al niño una vez en la espalda desde lo que los fiscales dicen que fue “relativamente cerca”.
La familia de Siderio demandó a Mendoza y a la ciudad en enero, diciendo que su muerte fue el resultado de “una abismal falla política sistémica” dentro del departamento de policía.
Hasta el momento no se ha revelado una fecha de sentencia.
La Comisión de Supervisión de la Policía de Filadelfia envió un comunicado sobre la declaración de culpabilidad en el caso de Thomas 'T.J.' Siderio:
La Comisión de Supervisión de la Policía de Filadelfia reconoce la noticia sobre la declaración de culpabilidad del exoficial de policía de Filadelfia Edsaul Mendoza por el asesinato en tercer grado a tiros de Thomas “T.J.” Siderio, de 12 años, hace más de dos años.
Si bien esta declaración no puede traer a T.J. de regreso, esperamos que marque el cierre de un capítulo doloroso que su familia y la comunidad han experimentado. Nuestros pensamientos permanecen con la familia y los amigos de T.J. mientras continúan atravesando el dolor de esta trágica pérdida. Si bien este incidente ocurrió hace dos años, es importante señalar que han sido dos años de cumpleaños, días festivos y recuerdos sin T.J.
La Comisión sigue comprometida a supervisar las prácticas policiales y garantizar que los agentes rindan cuentas de sus acciones. Reconocemos la importancia de la transparencia, la rendición de cuentas y la justicia en la actuación policial, y continuaremos trabajando incansablemente para promover estos valores dentro de nuestra comunidad.
Este caso demuestra la necesidad esencial de una supervisión y reforma rigurosas en la aplicación de la ley. Elogiamos los esfuerzos de la Oficina del Fiscal de Distrito de Filadelfia y de todas las partes involucradas para llevar este caso a una resolución justa. Su dedicación a defender la ley y buscar justicia sienta un precedente vital para futuros casos relacionados con mala conducta policial.
